2 preguntas relacionadas al tema : El sentir y emociones de las personas frente a estos cambios
2 preguntas relacionadas al tema : Situacones positivas que han sucedido en mi familia durante la pandemia
es para hoy plsss coronita al que me responda todo
Respuestas a la pregunta
RESPUESTA: POR CORONITA :)
A finales del 2019, se identificó en China un nuevo coronavirus al que se lo denominó COVID-19.
Debido a su velocidad de expansión y gravedad,
el 11 de marzo-2020, la Organización Mundial de
la Salud (OMS) lo declaró como pandemia1
.
En Argentina el primer caso confirmado fue
el 5 de marzo-2020. Desde entonces el número de
contagios aumenta rápidamente, y se implementan diversas medidas para su prevención, siendo
el aislamiento social preventivo y obligatorio,
desde el 20 de marzo-2020, la de mayor impacto
social.
Un evento tan disruptivo genera diversos
efectos en la salud de la población. Aún no existen vacunas ni tratamientos efectivos, se desconoce la duración de las medidas de aislamiento,
y se estima un alto impacto económico, social
y sanitario, lo que aumenta aún más la incertidumbre. En toda pandemia es esperable que las
personas sientan miedo, ansiedad, angustia, irritabilidad, estrés y enojo, recuerdo de traumas,
dificultades para la concentración y/o problemas
en el sueño2
.
Para abordar el impacto en la salud mental,
ya en 2006 la Unidad de Salud Mental de la Organización Panamericana de la Salud elaboró un
documento técnico para orientar y guiar las acciones en el campo de la salud mental en contexto
de epidemias. Recientemente, ante el COVID-19,
la OMS3
elaboró una serie de mensajes para apoyar el bienestar mental y psicosocial orientado a
diferentes grupos. Por ejemplo, recomienda buscar información en fuentes confiables, indagar
historias positivas de personas que se ha recuperado del COVID-19, o mantener rutinas diarias.
En nuestro contexto, el Ministerio de Salud de la
Nación ha elaborado diversas recomendaciones
para reducir el impacto en la salud mental4
.
Trabajos recientes advierten sobre las consecuencias en la salud mental que el COVID-19 y el
aislamiento social provocan en la población5,6. En
este sentido, en China el 53,8% de personas clasificó el impacto psicológico del COVID-19 como
moderado o severo7
. Asimismo, en se identificó
como grupos más vulnerables a quienes deberían
dirigirse los apoyos psicoterapéuticos a: personas
infectadas y quienes tienen vínculos cercanos con
ellas, personas con condiciones previas de padecimiento mental y subjetivo, y personal del sistema de salud8
. Estos tres grupos también fueron
señalados por Inchausti et al.9
quienes, además
destacan la importancia de identificar riesgos y
ofrecer intervenciones psicoterapéuticas flexibles
y dinámicas ante las diferentes fases de la pandemia.
En China se ha implementado atención psicológica de emergencia para paliar el impacto en
la salud mental ante el COVID-1910. Sin embargo, Duan y Zhu11 advierten falencias en la atención psicológica brindada ante la pandemia. En
Singapur, también se destaca la falta de planificación y coordinación para organizar la atención
psicológica ante el COVID-19 y advierten la influencia de los medios masivos de comunicación
y las redes sociales en la salud mental12.
La OMS13 ha advertido que el impacto en la
salud mental de una epidemia, generalmente, es
más fuerte entre quienes viven en situación de
exclusión social o las personas mayores. En este
marco, resulta importante reconocer las diferencias de vulnerabilidad de los distintos grupos
poblacionales, en especial las relacionadas con el
género, la edad, y el nivel socio-económico.
Atender el impacto de la pandemia en la salud mental es importante no solo para mejorar la
salud sino también para evitar otros problemas
sociales, tales como la estigmatización de personas, la falta de adherencia a medidas de prevención, y el duelo frente a la pérdida de seres
queridos. En definitiva, estos factores tienen un
rol fundamental para afrontar la pandemia de
manera integral2
.
Atendiendo al impacto social y subjetivo que
el COVID-19 produce a nivel global, este trabajo se propone como objetivo explorar los sentimientos y expectativas que genera el COVID-19
en las personas durante la primera etapa de la
pandemia en Argentina.
Metodología
Diseño del estudio y recolección de datos
Este estudio transversal implementado en
Argentina sigue la propuesta del estudio “COVID-19 Snapshot MOnitoring (COSMO):Monitoring knowledge, risk perceptions, preventive
behaviours, and public trust in the current coronavirus outbreak”14, elaborado por la Oficina
Regional Europea de la OMS. Adopta la modalidad de recolección de datos en fases u olas para
obtener información en distintos momentos de
la situación epidemiológica.
Los datos fueron recolectados a través de un
cuestionario diseñado por dicho estudio y adaptado al contexto argentino.