2 peticiones de Jesús
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Hacer peticiones incluye pedir favores, pedir ayuda y pedir a otra persona que cambie su forma de comportarse.
La persona que hace una petición espera que ésta sea aceptada: no facilita el rechazo a la otra persona.
Una petición no es sinónimo de exigencia, hay que reconocer el derecho del otro a rechazar la petición.
Si la respuesta de la otra persona no es clara, ha de expresarse de nuevo la petición.
Si la respuesta de la otra persona es “no”, no ha de insistirse más de una vez pues podría parecer que no se respeta su derecho a decir no.
Creencias poco racionales como las siguientes pueden bloquear respuestas asertivas: “si pido un favor, estaré en deuda con esa persona y no quiero tener esa obligación”, “si hago una petición la otra persona no será capaz de decir que no, incluso aunque quiera rechazarla”.
Recomendaciones para hacer peticiones:
Sé directo.
No es necesario que te justifiques, aunque las explicaciones normalmente ayudan.
No es necesario que te disculpes por pedir algo.
Hay que estar preparado tanto para escuchar un “no” como un “sí”, y respetar el derecho de la otra persona a decirlo.
Cómo hacer peticiones paso a paso:
Avisa de que vas a pedir un favor: “Mira, Raúl, te tengo que pedir un favor”.
Pídelo directamente y sin rodeos comenzando por: “Me gustaría que…”, por ejemplo: “Me gustaría que el próximo viernes de 9 a 12 de la noche te quedases en mi casa para cuidar de mi sobrina pequeña”.
Este punto es opcional. Explica las consecuencias positivas que se obtendrían del favor que te hace la otra persona comenzando por: “De esta manera”, por ejemplo: “De esta manera, podría ir a cenar con los compañeros de trabajo”.
Consigue una respuesta: un sí o un no. ¿Te parece bien? o ¿Estás de acuerdo? o ¿Cuento contigo, verdad?
Cómo NO hacer peticiones
De manera agresiva, ya que provoca el rechazo o una respuesta de defensa, por ejemplo: “Estoy hasta las narices de hacer todo lo que me pides… así que como no hagas esto que te pido vas a tener problemas”. Esto puede provocar una respuesta similar a: “Yo también estoy harto de que vengas siempre con lo mismo. Si tan harto estás, ya sabes lo que hay”.
De manera inhibida, ya que se facilitan al otro los argumentos para rechazar nuestra petición, por ejemplo: “Mira…, si…, iba a pedirte una cosa, pero tampoco es muy importante. A ver si algún día, cuando podáis…, os pudierais quedar con mamá. Pero…, vamos… que si no podéis lo entiendo, vaya…”. Esto puede provocar una respuesta similar a: “La verdad es que me gustaría ayudarte, pero estoy muy ocupado estos días. Ya te llamaré cuando pueda”.
Explicación:
Espero que te sirva mi respuesta me puedes dar una Corona siiiiiiiiiiiiiii y si quieres que te ayude en mas sígueme