19. Indica si las palabras destacadas en estos enunciados son
polisémicas u homónimas. ¿Cómo lo has identificado?
a) Ha venido a verte (don) Antonio Bergaz.
b) ¡Cómo canta! Esta chica tiene un (don) especial.
c) Hoy comeremos (bonito) con tomate.
d) Me hicieron un (bonito) regalo.
e) Los grupos especiales desactivaron la (bomba).
f) Se ha estropeado la (bomba) de la caldera.
Respuestas a la pregunta
Respuesta: son todas polis embicad
a) don, tratamiento de respeto hacia una persona
b) don, virtud, gracia
c) bonito, nombre de un pez
d) bonito, hermoso, lindo
e) bomba, arma mortal
f) bomba, tipo de motor que acciona la caldera
Explicación:
una palabra polisémica es aquella que tiene varios significados, es decir, una palabra polisémica tiene un único significante o forma y diversos significados.
Por el contrario, las palabras homónimas son aquellas que en el pasado tuvieron diferente forma, diferente significado y diferente etimología. Sin embargo, por la evolución de la lengua, estas han terminado teniendo una forma idéntica o muy parecida
Las palabras polisémicas
En el caso de las palabras polisémicas, estas se escriben exactamente igual ya que tienen el mismo origen etimológico. Además, su categoría gramatical es la misma. Es por ello que aparecen en la misma entrada del diccionario.
Un ejemplo de polisemia es la palabra cabo, que tiene un total de 22 significados, según la Real Academia de la lengua Española (RAE). A pesar de sus diferentes usos, su origen etimológico es el mismo: procede de la palabra latina ‘caput’.
Las palabras homónimas
Por su parte, las palabras homónimas no siempre se escriben igual. A raíz de este hecho debemos dividirlas en dos categorías: palabras homógrafas –aquellas que se pronuncian y escriben de la misma manera- y palabras homófonas –aquellas que se pronuncian igual pero se escriben diferente-. Uno de los ejemplos más claros de homofonía lo podemos ver en las palabras vaca (“hembra del toro”) y baca (“soporte en el techo de un vehículo”).