12394238 como se escribe
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación paso a paso:
En estos momentos que estamos viviendo de incertidumbre, donde cada día se ha convertido en una ola emocional para nosotros mismos y para los demás, donde hemos abandonado nuestras rutinas y preocupaciones diarias, donde los medios tecnológicos han inundado nuestro quehacer, donde las dificultades económicas se han incrementado de forma exponencial, la convivencia en el seno familiar ha necesitado y continúa necesitando una adaptación a esos cambios, un tratamiento asertivo de alta intensidad en las relaciones, unas estrategias que rebajen el elevado estrés personal, familiar, social y laboral que se respira en el ambiente.
Este año vivimos momentos de crisis, de incertidumbres y de cambios. Nos encontramos entre el miedo y la esperanza. Miedo a un futuro incierto, precario y problemático que está por venir, pero, esperanza en conseguir reforzar las unidades familiares frente al desafío del cambio de valores, de fortalecer relaciones interpersonales íntimas en el seno familiar que han sufrido una prueba de fuego, de prestar ayuda para que las miembros de las familias aprendan a defender lo básico y fundamental frente a la crisis económica en la que gran parte de la población se verá obligada a prescindir de lo superfluo, de facilitar el diálogo intergeneracional. En fin, de afrontar con fortaleza esta pandemia que nos ha tocado vivir.
La convivencia no es fácil, pero en estado de alarma y con el confinamiento, se producen mucho más conflictos y fricciones difíciles de manejar con las personas que más queremos, nuestras parejas, hijos/as, nuestros/as mayores, etc. Podemos interpretar esta situación como una oportunidad para conocernos mejor, para hacer cosas y compartirlas, de esas que queríamos realizar, pero nunca teníamos tiempo. Pero, aunque nuestra interpretación de esta situación sea con un talante positivo, no olvidemos que genera un estado de ansiedad, que unido al poco espacio que tendremos para cada uno/a y que será compartido, hará que fluyan conflictos y fricciones en la convivencia.
El camino se puede iniciar creando un tiempo para la reflexión a partir de nuestra capacidad para encontrar soluciones a problemas que hasta ahora no habíamos enfrentado, en resumen, una oportunidad para potenciar nuestra mejor versión de nosotros mismos como seres sociales y, por tanto, familiares.
Respuesta:
doce millones trescientos noventa cuatro mil doscientos treinta ocho