1.-¿Qué fue la peste negra? 2.-¿Cuándo inicio esta pandemia? 3.-¿Cómo se transmitía la enfermedad? 4.-¿Qué consecuencias trajo a la población? 5.-¿Qué similitudes tiene la peste negra con la pandemia actual del COVID-19
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1.- La peste negra o muerte negra fue la pandemia de peste más devastadora de la historia de la humanidad, que afectó a Eurasia en el siglo XIV y que alcanzó un punto máximo entre 1347 y 1353. ... Hamburgo, Colonia y Bremen fueron las ciudades en donde una mayor proporción de la población murió
2.- El 31 de diciembre de 2019, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recibió reportes de presencia de neumonía, de origen desconocido, en la ciudad de Wuhan, en China. Rápidamente, a principios de enero, las autoridades de este país identificaron la causa como una nueva cepa de coronavirus. La enfermedad ha ido expandiéndose hacia otros continentes como Asia, Europa y América.
3.- Los coronavirus humanos se transmiten de una persona infectada a otra: A través del aire, al toser y estornudar. Al tocar o estrechar la mano de una persona enferma o al tocar un objeto o superficie contaminada; y llevarse las manos sucias a la boca, la nariz o los ojos.
4.-La pandemia actual está afectando seriamente la desigualdad social, la distribución de recursos en el largo plazo y la igualdad de oportunidades en numerosas dimensiones. Aquí pondremos el foco en uno de los canales de transmisión más importantes de dichos efectos en el largo plazo: la transmisión intergeneracional de la desigualdad. Este artículo resume brevemente la literatura disponible que evidencia cómo los recursos que poseen los progenitores afectan los logros que alcanzan sus hijos. La investigación tendrá el objetivo de evaluar en qué dimensiones la pandemia amplificará las desigualdades prexistentes en la sociedad. En una primera instancia, la interrelación entre la educación, el nivel de ingresos y la salud terminará por delimitar el impacto del COVID-19 sobre las generaciones futuras. Deberán diseñarse estrategias adecuadas, con vistas tanto en el tiempo presente como en el futuro próximo, para controlar la propagación y salvar vidas, así como prevenir una crisis social en el largo plazo mediante la protección de los intereses de las familias más vulnerables.
5.- En el caso del coronavirus, China fue el primer país en imponer la cuarentena a sus ciudadanos para luchar contra el Covid-19. Una decisión que pocas semanas después adoptaron otros numerosos gobiernos del mundo: primero fueron Italia, España o la India, y después ha sido implementada en otras regiones para intentar contener el número de contagios de coronavirus.
En concreto, nuestro país lleva en 'cuarentena' dos semanas, después de que el pasado 14 de marzo, el Gobierno decretara el Estado de Alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus Covid-19. Una decisión que se ha ampliado en el tiempo, tras la autorización del Congreso de los Diputados al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Este 'confinamiento' obliga a los españoles a permanecer en sus casas, con los movimientos limitados (solo salir para ir al supermercado, la farmacia, el cuidado de dependientes, etc.) hasta, como mínimo, el próximo 11 de abril. No obstante, el Gobierno baraja prolongar el Estado de Alarma aún más, aunque no tomará la decisión definitiva hasta los próximos días, tras escuchar a los expertos.
25 millones de muertes por la peste negra
Otro ejemplo claro de limitación del movimiento entre los ciudadanos a lo largo de la Historia por una crisis sanitaria se vivió con la llamada ‘peste negra’. De hecho, esta enfermedad provocó uno de los confinamientos más duros que vivió Europa tuvo lugar en el siglo XIV.
Una pandemia que solo en el 'Viejo Continente' dejó cerca de 25 millones de muertos, aunque se calcula que esta pandemia sesgó la vida de entre 40 y 60 millones de personas más en África y Asia, y cuyas consecuencias se han alargado durante décadas en estos países. Desde entonces, cualquier brote de peste ha sido temido por todas las clases sociales.
Ante el avance imparable de la enfermedad, fueron muchos los príncipes, como los italianos, los que decidieron cerrar sus ciudades para evitar la entrada de personas contagiadas. Esta misma medida fue adoptada por los distintos gobernantes de las ciudades y regiones europeas a las que llegaba la enfermedad.
Sin embargo, no hace falta retroceder tanto en el tiempo para ver que el confinamiento fue una decisión recurrente. Otro ejemplo en la Historia lo encontramos en el siglo XVIII, momento en el que Girona cerró las puertas de la ciudad para evitar la entrada de todas las personas que vinieran desde Francia, a causa de la llamada 'Gran Peste de Marsella'. En esta ocasión, se trató de una enfermedad que sesgó a la población del sur del estado galo.