Question

1. Lee el siguiente texto e identifica los referentes que aparecen allí. Indica, luego, qué tipo de palabras son (adverbio, pronombre, determinante, etc.).
–¿Qué he hecho mal? –grité–. Juro por mi padre que no podía andar. Me han llevado a la farmacia, donde me han dado un analgésico. Madre me miró el pie. Lo tenía tan hinchado que parecía un almohadón. Nada más tocármelo, solté un aullido de dolor. –No le hagas caso –le espetó Ahmad–. Después del escándalo que ha montado, ¿todavía quieres mimarla? –¿Escándalo? –¿Quién ha montado el escándalo, yo o tú, que llegas borracho a casa todos los días y tienes tratos con una mujer casada? Ahmad se abalanzó sobre mí y me pegó en la boca con el dorso de la mano, tan fuerte que empecé a sangrar. –¿Acaso miento? –le grité hecha una furia–. Te vi con mis propios ojos. Te colaste en su casa cuando no estaba su marido. Y no era la primera vez. –El segundo golpe, esta vez en un ojo, me dejó aturdida. Por un instante creí que me había quedado ciega. –¡Cállate, niña! –gritó madre–. ¡No seas desvergonzada! –¡Espera a que se lo cuente a su marido! –grité. –¿No te he dicho que te calles? –repitió madre, acercándose para taparme la boca con la mano. –¿No sabes que llega borracho a casa todas las noches? –chillé fuera de mí zafándome de ella–. Y dos veces la policía se lo ha llevado a la comisaría por amenazar a alguien con un cuchillo. ¡Eso no son escándalos, pero, si yo me tomo una aspirina en la farmacia, deshonro a toda la familia! Recibí dos bofetadas seguidas y noté un zumbido en los oídos, pero no podía controlarme ni dejar de gritar. –Cállate. ¡Que Dios te castigue con la difteria! ¡No es lo mismo, tú eres una chica! –Madre rompió a llorar, alzó los brazos al cielo y suplicó–: ¡Sálvame, Dios mío! ¿A quién puedo acudir? Que Dios te castigue, niña. Rezo para que te fulmine. Yo estaba tirada en el suelo, en un rincón de la habitación, abatida y con los ojos anegados en lágrimas. ​

Answer 1

siuuuuuuuu

2-2=0
siuuuuuuuuu